Jerusalén, 10 de agosto de 2025 — El primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, declaró que el país lanzará muy pronto una ofensiva militar para desmantelar los dos últimos bastiones de Hamás: la ciudad de Gaza y los campos de refugiados en la zona central y sur del enclave, conocidos como Mawasi.
En una rueda de prensa internacional —la primera en un año— Netanyahu anunció que antes de iniciar la operación se establecerán zonas de seguridad para reubicar a la población civil, ofreciéndoles comida, agua y atención médica. Sin embargo, la ONU ha advertido que tales zonas podrían convertirse en “campos de concentración” de facto.
En cuanto al control territorial, el primer ministro afirmó que Israel domina entre el 70 % y el 75 % de Gaza, mientras que la Oficina de la ONU para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA) eleva la cifra al 86,3 %, considerando tanto las zonas bajo control militar como aquellas con órdenes de evacuación.
Netanyahu presentó además los cinco principios que, según él, deben cumplirse para concluir la ofensiva:
- Desarme de Hamás
- Liberación de todos los rehenes
- Desmilitarización de Gaza
- Control de seguridad por parte de Israel en el enclave
- Creación de una administración civil pacífica no israelí
Contexto y repercusiones
- Este anuncio confirma la resolución aprobada por el gabinete de seguridad israelí el jueves pasado, que instruyó al ejército a desmantelar los bastiones restantes de Hamás en la ciudad de Gaza y Mawasi.
- La declaración se suma a una escalada militar significativa: hace dos días, el gabinete de seguridad autorizó el control total de la ciudad de Gaza pese a la condena internacional.
- Organismos internacionales y gobiernos europeos han advertido sobre la crisis humanitaria, alertando del riesgo de hambruna, muertes masivas en puntos de entrega de ayuda y una posible ocupación contraria al Derecho Internacional.