Washington, D.C. — El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha manifestado su frustración con el presidente ruso, Vladimir Putin, debido a lo que considera una falta de compromiso del líder ruso para resolver el conflicto en Ucrania. En una reciente conferencia de prensa conjunta con el primer ministro del Reino Unido, Keir Starmer, Trump reveló que la situación se ha tornado más complicada de lo anticipado, especialmente considerando su relación personal con Putin.
Durante la reunión, que formó parte de una visita de Estado enfocada en la cooperación política y económica, Trump expresó que esperaba un desenlace más sencillo del conflicto ucraniano. Sin embargo, hasta el momento, no ha anunciado la implementación de nuevas sanciones ni ha descartado la mediación de Estados Unidos, a pesar de reconocer que el conflicto "no afecta directamente a Estados Unidos".
Starmer, por su parte, criticó las acciones recientes de Putin, señalando los ataques a objetivos civiles en Ucrania y el uso de drones en Polonia, un miembro de la OTAN. Estas acciones, según Starmer, son indicativas de una falta de interés en buscar la paz. El primer ministro británico destacó la importancia de mantener la presión sobre Rusia y reafirmó el compromiso del Reino Unido de apoyar a Ucrania durante toda la duración del conflicto.
El presidente Trump no ha ocultado su decepción, especialmente al observar que las Fuerzas Armadas rusas están sufriendo bajas significativas comparadas con las pérdidas del ejército ucraniano. A pesar de estos desafíos, Trump no ha dado señales de retirarse de la mediación, aunque sugirió que la distancia geográfica entre Estados Unidos y el conflicto podría ser un factor a considerar.
Mientras tanto, las tensiones continúan escalando, y el futuro del conflicto sigue siendo incierto, con líderes occidentales buscando estrategias efectivas para gestionar la situación y apoyar a Ucrania en su lucha.