Trump expresó optimismo respecto a las conversaciones con Putin, calificándolas de potencialmente "constructivas". Anticipó que, al concluir su reunión, se comunicará de inmediato con los mandatarios europeos y con Zelenski para discutir los avances logrados.
Aunque aún no está claro si Trump participará directamente en el futuro encuentro entre los líderes de Rusia y Ucrania, subrayó su firme intención de facilitar una reunión entre ambos para avanzar hacia una resolución del conflicto. "Esta es una guerra que nunca debió ocurrir", afirmó, destacando su disposición a estar presente si se requiere su mediación.
Trump también enfatizó su compromiso de dialogar con sus aliados en Europa y con Zelenski antes y después de su reunión con Putin. Aclaró que su papel se limitará a facilitar el diálogo, sin intervenir en las decisiones finales que correspondan a ambos países.
La reunión en Alaska, prevista para el 15 de agosto, marcará el primer encuentro directo entre Putin y un presidente estadounidense desde el inicio del conflicto en Ucrania en febrero de 2022. Trump aspira a que esta cita sea un paso significativo hacia el cese inmediato de hostilidades y valoró positivamente la disposición de Putin de viajar a territorio estadounidense para el diálogo. Los detalles exactos y logísticos del evento aún están siendo organizados.